domingo, 9 de marzo de 2014

RESULTADO DEL SACRIFICIO MATERNO

Y en Éxodo Capítulos 7-10 la Biblia nos cuenta la historia de Moisés, una vez vuelto de su exilio en Madián, el hijo que Jocabed estuvo dispuesta a dejar ir, ahora era usado por DIOS para castigar a Egipto y liberar a Israel luego de más 400 años de esclavitud. 

Disfruten el siguiente video 


MADRE QUE SE SACRIFICÓ POR SU HIJO

En La Biblia, en el libro de Éxodo Capítulo 2 versículos 1-10 nos cuenta la historia de Jocabed, una madre amorosa, quien puso a su hijo en una canasta y lo envió por el río Nilo para que su hermoso bebé no fuera asesinado por los egipcios.

Jocabed hizo un enorme sacrificio por amor a su hijo, y DIOS la recompensó siendo la madre del libertador de Israel; Moisés.

Disfruten del sacrificio de Jocabed mostrado a través de la película de Dreamworks "El Príncipe de Egipto" 



EL HIJO SE CONVIERTE EN PADRE

La manera de criar de un padre y madre son determinantes en nuestras vidas. Ya sea con amor, ya sea con severidad, pero su educación siempre repercute en las personas que somos hoy en día. Disfruten el siguiente corto-documental llamado "El hijo se convierte en padre" y dennos su opinión 


ESA PERSONA ESPECIAL

El afán sin conocimiento no vale nada; mucho yerra quien mucho corre.
Proverbios 19:2

Es importante aclarar que no necesariamente tenemos algo en contra de los noviazgos que duran mucho tiempo. No obstante, sí estamos proponiendo que el tiempo de compromiso, de noviazgo, debería ser mucho, muchísimo más corto que la etapa de amistad. Lo que sucede es que la amistad podría ser tan buena que pronto se involucren las emociones. Las parejas se enamoran, o sea, inician una relación sentimental, sin ponerle freno a estos sentimientos y terminan arruinando algo que hubiera podido ser muy bueno.

Esa persona especial
¿Te estás preguntando con quién deberías casarte?

Para esos de ustedes que se encuentran preguntándose si son el uno para el otro escribimos un libro llamado Cómo encontrar tu pareja ideal. Aquí les mostramos los principios bíblicos para la búsqueda de esa persona ideal.

Dios nos ha dado principios para nuestras relaciones que han dado resultado desde el principio del tiempo hasta ahora.

Si tú crees que encontraste la persona adecuada, y si te estás preguntando acerca de cómo establecer una buena base para estar juntos toda una vida y si te estás preguntando acerca de cuestiones del noviazgo que han surgido, sigue leyendo.

Dios nos ha dado principios para nuestras relaciones que han dado resultado desde el principio del tiempo hasta ahora. Son de un valor incalculable en nuestra vida. Es evidente que te guiarán también.

¡Los principios de Dios nunca caducan!

En el principio, Dios hizo la tierra y también un maravilloso lugar, un lugar de diversión, si así lo prefieres, para su mejor creación: el hombre. Dios hizo las cosas perfectas en el jardín del Edén, pero el hombre lo arruinó todo. ¿Recuerdas la historia?

Dios puso a Adán y Eva en un hermoso jardín y les dio alimento de «todos los árboles» en el jardín (Génesis 2:16). Sin embargo, no podían comer «del árbol del conocimiento del bien y del mal», pues cuando lo hicieran, de seguro morirían (Génesis 2:17). Es evidente que Dios les dijo a Adán y Eva que todo era posible, excepto una cosa. Tenían que demostrar su amor por Él al no comer de un árbol. No sabemos cuánto tiempo Adán y Eva obedecieron a Dios, pero sí sabemos que, al final, no pasaron la prueba.

No sabemos cuánto tiempo Adán y Eva obedecieron a Dios, pero sí sabemos que, al final, no pasaron la prueba.

¿El pecado original fue la relación sexual?

No, no lo fue. El pecado original fue la desobediencia.

Optaron por creer una mentira y siguieron sus propios deseos. Adán y Eva deseaban conocer, ser y hacer todas las cosas «como Dios». Querían ser tan poderosos como Dios. Deseaban experimentar el bien y el mal. ¡No tenían ni idea de las terribles consecuencias de su desobediencia! En Génesis 3:1-7 dice:

La serpiente era más astuta que todos los animales del campo que Dios el Señor había hecho, así que le preguntó a la mujer:
¿Es verdad que Dios les dijo que no comieran de ningún árbol del jardín?
Podemos comer del fruto de todos los árboles —respondió la mujer—. Pero, en cuanto al fruto del árbol que está en medio del jardín, Dios nos ha dicho: “No coman de ese árbol, ni lo toquen; de lo contrario, morirán”.
Pero la serpiente le dijo a la mujer: ¡No es cierto, no van a morir! Dios sabe muy bien que, cuando coman de ese árbol, se les abrirán los ojos y llegarán a ser como Dios, conocedores del bien y del mal. La mujer vio que el fruto del árbol era bueno para comer, y que tenía buen aspecto y era deseable para adquirir sabiduría, así que tomó de su fruto y comió. Luego le dio a su esposo, y también él comió. En ese momento se les abrieron los ojos, y tomaron conciencia de su desnudez. Por eso, para cubrirse entretejieron hojas de higuera.

La serpiente fue, en este caso, la forma de vida usada por el ser maligno que conocemos hoy en día como Lucifer, Satanás o el diablo. Este sembró la duda en las mentes del hombre y la mujer, torciendo las palabras de Dios y haciendo que Adán y Eva dudaran de las motivaciones de Él.

En la actualidad, nosotros los seres humanos no somos diferentes a Adán y Eva. Nos engañan con mucha facilidad. Estamos muy dispuestos a ser desobedientes. ¡Todavía pensamos que sabemos más que Dios! Seis mil años más tarde, ¡parece que el truco aún da resultados! Ya sea por Hollywood o por una serpiente, se tuerce la verdad.

Se nos dice que podemos «seguir a nuestros corazones» y, por lo tanto, conocer nuestro camino, aun cuando la Biblia es clara al decir que... Engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso; ¿quién lo conocerá?
Jeremías 17:9, rv-60

¿Por qué deberíamos confiar nuestro futuro a un deseo repentino o sentimiento? ¿Por qué no queremos saber cómo hacer una sabia elección?

Nos imaginamos que podemos salir con alguien a «nuestra manera», que podemos saber «el bien y el mal» y que podemos lidiar con esto. Sin embargo, cuando se rechaza la dirección de Aquel que quiere lo mejor para nosotros, del Único que puede ver el futuro, ¿cómo es posible que tengamos éxito?

¿Cómo podemos encontrar la felicidad?

¡En nuestras vidas, no fue hasta que decidimos seguir a Dios con todo nuestro corazón, nuestra mente y alma que nos encontramos el uno al otro! Cuando nos conectamos con nuestro Creador, Él nos mostró su maravilloso plan. No fue amor a primera vista, ¡sino que fue una pura aventura!

Una de las cosas que hemos observado una vez tras otra es que, a menudo, la mayor tentación, una vez que encontramos a la persona adecuada, es apartarnos del tiempo de Dios. Cuando el enemigo tentó a Jesús en el desierto, lo hizo prometiéndole las naciones si Él convertía las piedras en pan. ¿La verdadera tentación fue dietética? ¿La tentación estaba relacionada con la comida o el poder? No lo creemos. Creemos que la verdadera tentación fue tratar de apresurar a Cristo y sacarlo del tiempo de Dios. ¿Por qué? Porque Jesús sabía que un día toda rodilla se doblaría ante Él y toda lengua lo confesaría como Rey de reyes y Señor de señores. Un día todas las naciones serían suyas. Toda la riqueza, el poder, los alimentos y los deleites les pertenecerían. Sin embargo, el diablo quería apurar a Jesús. Satanás quería que Jesús apresurara las cosas y que las hiciera a su manera en lugar de esperar por el tiempo perfecto de Dios. Así que lo tentó: «Todo esto te daré» (Mateo 4:9).

La tentación de obtener las cosas al momento es difícil de resistir.

Cuando encontramos esa persona especial, ¡es muy duro esperar! Nuestra amistad con una persona digna es de esa manera. Vamos a tener la tentación de apresurarlo todo. ¡Anhelaremos
Involucrarnos emocionalmente AHORA! ¡Nos involucraremos de forma física AHORA! Casi podemos escuchar a la serpiente siseando:

«¡No esperes! ¡Hazlo AHORA! Es tu vida. ¡Haz lo que te apetezca! ¡Hazlo en cualquier momento y con quien quieras! ¡De seguro que no morirás!».

Sin embargo, Dios dice: «¡ESPERA!». Los que han vivido toda una vida gritan: «¡Espera! ¡Espera!
¡ESPERA!».
¿Qué es lo que saben que muchos tienen que aprender todavía? Han aprendido, a menudo de la forma más difícil, que los caminos de Dios, a la larga, ¡resultan ser mucho mejores!

Por: Ex31/Somos Novios ¿y ahora quién podrá ayudarnos?/Jeffrey y Wenona de León

KENDON: VOLUMEN UNO-CAPÍTULO 1

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